"Y dijo: Oíd, Judá todo, y ustedes moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. Jehová les dice así: No teman ni se amedrenten delante de esta multitud tan grande, porque no es suya la guerra, sino de Dios." 2 Cr. 20.15
Ante un problema, por más grave que sea, lo que debemos tener siempre presente, es nuestra confianza en Dios. Tener fe en que nos proveerá los medios para salir adelante. Nah. 1.7 dice: "Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían."
Jose, en el pasaje citado en el encabezado, el pueblo ayunó y oró a Dios en un momento difícil: entonces el Espíritu dijo... la batalla no es suya, sino de Dios. No tengas miedo cuando aparezca un problema, no desmayes y recuerda que la batalla es de Dios.
Declaración: Señor, no tengo miedo de ninguna situación ni desmayaré ante ninguna circunstancia, porque creo en ti. La batalla es tuya, tú peleas por mí, y saldré vencedor. Lo declaro en el Nombre de Jesús, amén.
Ante un problema, por más grave que sea, lo que debemos tener siempre presente, es nuestra confianza en Dios. Tener fe en que nos proveerá los medios para salir adelante. Nah. 1.7 dice: "Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían."
Jose, en el pasaje citado en el encabezado, el pueblo ayunó y oró a Dios en un momento difícil: entonces el Espíritu dijo... la batalla no es suya, sino de Dios. No tengas miedo cuando aparezca un problema, no desmayes y recuerda que la batalla es de Dios.
Declaración: Señor, no tengo miedo de ninguna situación ni desmayaré ante ninguna circunstancia, porque creo en ti. La batalla es tuya, tú peleas por mí, y saldré vencedor. Lo declaro en el Nombre de Jesús, amén.
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