Cristo murió por nuestros pecados

Cristo murió por nuestros pecados… fue sepultado, y…resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras. 1 Corintios 15:3-4.Dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida. Juan 11:25.

¿Muerto por cuánto tiempo?

Se le explicaba a una nena de cuatro años que su bisabuelo acababa de morir. Después de reflexionar, la pequeña preguntó: Dime, mamá, ¿abuelito va a estar muerto mucho tiempo? La pregunta parece ingenua, pero en realidad nos hace pensar.

¿Estaremos muertos para siempre?

En su Palabra Dios nos dice que los muertos despertarán. ¿No resucitó al Señor Jesús? La muerte es, pues, un estado o período del que algún día se saldrá para hallarse en presencia de Dios. Encontrarse frente al Dios justo y santo inspira temor si uno no está en paz con él. Sin embargo, Dios desea que nos reconciliemos con él; él mismo nos proporciona el medio para hacerlo: “Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo…” (2 Corintios 5:19).

Cristo vino, no para condenar al mundo, “sino para que el mundo sea salvo por él” (Juan 3:17).

Si creemos que él pagó con su vida el precio de nuestros pecados, entonces comprenderemos cuánto nos ama, y el temor dará lugar al gozo de estar en regla con Dios.

Nada, ni aun la muerte, puede destruir la relación personal que él establece con un ser humano: “El que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente”, dijo Jesús a Marta, hermana de Lázaro, a quien Jesús resucitó (Juan 11:25-26). El creyente está a salvo de la muerte eterna. ¡Qué liberación!